UBRIQUE Y SU SOLIDARIDAD

La solidaridad en Ubrique ha sido siempre un tema muy vivo pero como no había conciencia de clase arraigada pues se ha manifestado de otras maneras.

Cuando siendo un pequeña jo, que ya estaba en una fabrica, la primera vez que vi una cajita de cartón con un papelillo escrito con una caligrafía poco legible, me quedé asombrado de que la gente abriese el sobre después de cobrar y echase unas monedas, pregunté a alguien más "veterano" y me dijo que era de un hombre que necesitaba dinero para llevar al medico a su hija o hijo. Ya esto vi que era casi una rutina semanal de necesitados que recurrían a pedir ayudas para salir de una situación concreta.

En general en nuestro pueblo siempre hubo necesitados, que solían coincidir con personas que no querían trabajar en las "petacas". Los petaqueros aunque cuando había trabajo, nos reventábamos trabajando. Se comenzaba a las 8 de la mañana y salíamos a las 10 de la noche y nos llevábamos trabajo para traerlo hecho por la mañana, con lo cual te acostabas a las 12, la 1, las 2 y más de una noche sin dormir, a base de cafés y cigarros. Y no hasta el viernes sino sábado también, y nos llevamos trabajo para el domingo, que a veces también lo "aprovechábamos", para adelantar.

He coincidido con compañeros en varias empresas, que siempre fueron a tope, magnificas personas que casi sólo vivieron para trabajar, resultado: muerte prematura, jubilación por estar cascado de la columna,circulación,corazón. No conozco a más de diez personas que hallan llegado a los 65 años y se jubilaran normalmente.

Pero hubo épocas de vacas gordas, que los ingresos te permitían vivir más desahogado y tras mucho trabajar, tú y tu familia algunos compraban un coche, una segunda vivienda. estudios a los hijos, etc..

Meses después llegaron allí unos señores (Prudencio Cabezas, Antonio Candil y Pedro Medinilla), pararon la maquina de rebajar que hacía mucho ruido. Nos estuvieron hablando de hacer un instituto para que los hijos de Ubrique pudiesen estudiar y no solo fueran los hijos de los ricos, y al final estuvieron anotando los nombres de todos los que querían colaborar y las cuantías dispuestas a donar.También festivales de toros, gestiones buscando ayudas, una de ellas hecha por Pedro Bohorquez, consiguió los terrenos por una miseria, gracias a su dueño, descendiente de Ubrique, solo con la condición que le pusieran una calle a su nombre. Cosa no hecha hasta hoy.
Aquello se comenzó y es el Instituto Nuestra Srª de los Remedios.

En otro momento cuando yo era un joven representante sindical (probablemente el más joven de la provincia, 20 años). Paco Arenas Rodríguez que era presidente provincial del sindicato de la Piel, nos trajo la idea de crear una cooperativa para hacer vivienda, que fue copiada del Convenio de la Construcción provincial. Y en el siguiente convenio lo propusimos y se consiguió donde los trabajadores nos desquitarían de nuestra nómina 30 ptas./mes y las empresas pagaría 45 ptas./ mes por trabajador. Pasado el tiempo como no se podían comprar solares para empezar, se fue pensando en darle otros empleos. Se hizo una encuesta siendo yo presidente del Sindicato de la Piel y salió por mayoría hacer una cooperativa de consumo para poder abaratar los precios, que en esos años, los 70, el IPC subía en torno al 22 %/año. con lo cual los aumentos del convenio en pocos meses nos quedábamos a dos velas.

Propusimos a Pedro Medinilla Piñero como persona que más insistió en la idea, que lo fuera estudiando con un grupo de representantes sindicales y todo el pudiese aportar algo, aquello tomó forma y se convirtió en la Cooperativa de Consumo UNIFICACION que al día de hoy está con los últimos tramites previos al cierre ya que hace algunos años cesó en su actividad. Habiendo llegado a tener cinco tiendas, con unos 22 trabajadores, un movimiento económico entorno a los 500 millones de ptas./año, levantado un magnifico edificio de cuatro plantas, en un solar que en la república era la Casa de los Petaqueros. Con una seción de uso por 50 años y la segunda planta cederla para la Biblioteca Municipal.

En un momento que la piel estaba en crisis se movilizó todo el pueblo, que es lo que a los gobernantes al parecer les inquieta, por la perdida de votos, y una de las soluciones que se buscaron fue crear una Comercializadora, para poder llegar a todos los mercados que la gran mayoría de las empresas no podían llegar por estar descapitalizadas o ser muy pequeñas.
Otra vez el pueblo de Ubrique sacó el monedero y compró acciones, dándose el caso que hubo trabajadores que invirtieron más que algunos de los empresarios más significativos y que muchos políticos, que vivían de la política, que no siempre ha sido así.

Aquello quedó en un gran fracaso, Se montó una gran superestructura que se comió todo lo que le echamos no se cumplieron los objetivos, sólo quedó una empresa subvencionada (Qubri) que funcionó, 18 ó 20 años, como otra más de las legales y que tuvo unos pocos trabajadores que tuvieron un puesto de trabajo digno unos años.

Ante las condiciones de vida y trabajo que tenía el asilo, por ser un edificio muy antiguo se hicieron reuniones, por parte del patronato.Se puso en marcha construir una nueva residencia de ancianos con la ayuda de todo el pueblo aportando unos, una cuota periódica, otros gestión buscando subvenciones, y ayudas de toda índole, por ejemplo: de los pintores que donamos cuadros para subastarlos y sacar dinero, desfiles de moda, dibujos del logotipo frases de marketing "entre todos podemos".

A trancas y barrancas cuando el edificio comenzó a tener cuerpo, algunas administraciones que desde el principio prometieron, pero no dieron, o fue testimonial sus aportaciones. Empezaron a ver que el tren marchaba y ellos estaban pensando aun si subirse o no. Comenzaron a "situarse"
para salir en la foto de la inauguración.

Resultado un moderno y bien dotado edificio con 70 plazas y 10 más, de día. Unas 38/40 trabajadoras, muchas de ellas casadas, con lo difícil que sigue siendo encontrar trabajo en las empresas privadas.

Se ve cuando existe un liderazgo unipersonal o colectivo, que muestra la meta, que una mayoría hace suya, comienza a andar, enseñando el camino, eso no hay quien lo pare. Y la gente se apunta y creo que es una lección que deberían tomar en cuenta todo el que quiera hacer algo en Ubrique.